miércoles, 4 de diciembre de 2013

Persecución

¿Acaso creías, que por correr más,
de mí ibas a escapar, pequeño mortal?
Puedo ser un monstruo o tus pesadillas,
y tus dolores sólo serán un golpe colateral. 

Sangre como pintura para mis cartas,
cuervos diabólicos como mensajeros.
Tu buzón llenaré de terror en sartas,
hasta que demoniacos verás hasta los perros.

1 comentario:

  1. Cautivas con tus versos. Cuentas verdaderas historias, llenas de sentimiento.

    Enhorabuena.

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